Las bacterias orales y su impacto en la función cerebral durante el envejecimiento
Una investigación dirigida por la Universidad de Exeter sugiere que las bacterias presentes en la boca y la lengua podrían influir en el rendimiento cognitivo a medida que las personas envejecen. Los resultados, publicados en PNAS Nexus, indican que ciertas bacterias están asociadas con una mejor memoria y capacidad de concentración, mientras que otras podrían incrementar el riesgo de desarrollar Alzheimer. Por ello, los científicos concluyen que la composición bacteriana de la boca podría ser un indicador del estado de salud cerebral en la vejez.
De acuerdo con el estudio, existen dos posibles mecanismos por los cuales las bacterias orales afectan la función cerebral. Por un lado, las bacterias dañinas pueden acceder al torrente sanguíneo y afectar directamente al cerebro. Por otro, un desequilibrio entre bacterias beneficiosas y perjudiciales podría interferir en la conversión de nitrato en óxido nítrico, una molécula esencial para la comunicación neuronal y la formación de recuerdos.
Identificación de bacterias clave
El estudio se llevó a cabo con 110 personas mayores de 50 años, reclutadas del programa en línea Protect, que supervisa la salud cerebral de más de 25.000 individuos en el Reino Unido. Los investigadores agruparon a los participantes en dos categorías: aquellos sin deterioro cognitivo y aquellos con deterioro cognitivo leve, considerado un factor de riesgo para la demencia.
El análisis de muestras de enjuague bucal reveló que las personas con una mayor presencia de Neisseria y Haemophilus tenían un mejor rendimiento en pruebas de memoria, atención y resolución de tareas complejas, además de niveles elevados de nitrito en la boca. En contraste, una mayor cantidad de Porphyromonas se asoció con dificultades de memoria, mientras que altos niveles de Prevotella se relacionaron con una reducción en los niveles de nitrito y un posible deterioro cerebral, especialmente en personas con el gen APOE4, vinculado al Alzheimer.
La Dra. Joanna L’Heureux, autora principal del estudio, destacó que estos hallazgos podrían allanar el camino para pruebas dentales de rutina que midan los niveles bacterianos en la boca y permitan detectar señales tempranas de deterioro cognitivo. «Nuestros resultados sugieren que algunas bacterias pueden perjudicar la salud cerebral con el paso del tiempo», afirmó.
Por otro lado, la profesora Anne Corbett, coautora del estudio, resaltó el potencial de desarrollar estrategias para modificar la microbiota oral. «Si ciertas bacterias favorecen el rendimiento cerebral mientras que otras lo afectan negativamente, podríamos intervenir a través de ajustes en la alimentación, el uso de probióticos, hábitos de higiene bucal o tratamientos específicos», señaló.
El estudio fue financiado por Wellcome, el Centro de Investigación Biomédica de Exeter del Instituto Nacional de Investigación en Salud y Atención (NIHR) y la Colaboración de Investigación Aplicada del NIHR en la Península Suroeste (Penarc). Estos descubrimientos abren nuevas perspectivas para la detección temprana y la intervención en la salud cerebral mediante el análisis del microbioma oral.
Fuente: https://isanidad.com/321813/las-bacterias-de-la-boca-pueden-influir-en-la-funcion-cerebral-durante-el-envejecimiento/